CON MÁS DE 200 MILLONES DE USUARIOS EN TODO EL MUNDO, TRASCENDIÓ LARGAMENTE LOS LÍMITES DE LA PANTALLA CON MOVIMIENTOS, LENGUAJE Y ATUENDO PROPIOS. AQUÍ, LAS CLAVES PARA NO QUEDARSE AFUERA DEL ÚLTIMO GRAN FENÓMENO DE LA ERA DIGITAL.
En todos lados se habla de Fortnite. Los más chicos imitan sus bailes, compran disfraces y objetos para personalizar sus avatars, y usan palabras propias del juego para comunicarse entre ellos. Es el éxito del momento, un asunto de supervivencia y habilidad que trasciende edades y genera fanatismo hasta entre adultos, que no se resisten a una partida. Como lo indica su nombre, Fortnite Battle Royale es un juego del género “batalla real”. Transcurre en una isla rodeada por una tormenta que va achicando el mapa y obligando a los jugadores a eliminarse entre sí. Para sobrevivir deben formar equipos, explorar, conseguir armas, hacer construcciones, defenderse y, principalmente, matar. El objetivo es ser el último jugador (o equipo) vivo en el campo de juego.
A medida que pasa el tiempo, el mapa de la isla se va achicando y obliga a los jugadores a eliminarse entre sí.
Desarrollado por la firma Epic Games (que ya obtuvo ganancias por 3 mil millones de dólares) y lanzado al mercado en 2017, Fortnite permite a los usuarios competir desde cualquier equipo con conexión a Internet, dado a que es multiplataforma. No importa si están conectados desde una consola, la PC o un celular; el único accesorio necesario es un par de auriculares con micrófono. El juego tiene un chat de voz incorporado para que los jugadores se comuniquen entre sí. Pero lo que realmente popularizó a este fenómeno fue su modelo de descarga gratuito: para jugar, la empresa sólo exige un registro en la web. Por esta razón, el gran negocio de Epic Games son las compras dentro del mismo juego; y aunque son meramente estéticas y no inciden en el desarrollo de la partida, parte del atractivo de Fortnite son los disfraces y accesorios que lucen los personajes, sus gestos y bailes, y los detalles de las armas que utilizan.
PARA SOBREVIVIR, LOS JUGADORES DEBEN FORMAR EQUIPOS, EXPLORAR, CONSEGUIR ARMAS, HACER CONSTRUCCIONES, DEFENDERSE Y, PRINCIPALMENTE, MATAR.
Es la nueva adicción digital y, como suele suceder, trasciende la pantalla: el jugador de fútbol francés Antoine Griezmann festeja sus goles imitando el baile “Take the L” y una cadena inglesa de gimnasios ofrece clases de fitness para chicos basadas en los pasos de los personajes. Fortnite requiere de pensamiento táctico, ingenio y creatividad para sobrellevar las partidas. Es por eso que en los Estados Unidos ya hay padres que pagan por entrenadores para que sus hijos jueguen mejor; y este año, la editorial Hachette publicará manuales y guías de estrategia oficiales para conocer a fondo todos sus trucos. El juego es un desafío en sí mismo y nadie quiere quedarse afuera de este fenómeno. ¿La clave de su éxito? El dinamismo, la intensidad y su constante evolución.
DICCIONARIO GAMER
Baneo (del inglés “ban”): la expulsión de un usuario por violar las políticas de juego. Puede durar horas o días.
Emotes: los bailes, gestos y movimientos especiales que hacen los avatars de los jugadores.
Farmear (del inglés “farm”): recolectar recursos y municiones en el campo de juego.
Grifeo (del inglés “griefing”): es la conducta de usuarios que sólo buscan molestar a otros en un juego.
Loot: los botines (armas y equipamientos) que se agarran en el mapa, en especial cuando se elimina a un enemigo.
Noob: es la forma despectiva de llamar a un jugador inexperto.
