La Pascua es una festividad religiosa que celebra la muerte y resurrección de Cristo, la cual tiene como costumbre principal regalar huevos de chocolate. Te invitamos a descubrir cómo surgió dicha tradición y a conocer la mejor receta para que deleites a tus seres queridos.
El Huevo de Pascua representa el inicio de la vida y la fertilidad. Para los cristianos, simboliza la Resurrección de Jesús y la esperanza de una nueva vida. La tradición comenzó debido a que los católicos que realizaban la Cuaresma, no podían comer carnes, lácteos o huevos. Ante ello, los guardaban y para mantenerlos frescos los bañaban con una fina capa de cera líquida.
Cuando terminaba la Cuaresma, los fieles se reunían en la iglesia de su pueblo y los regalaban, decorados con motivos festivos, ya que Jesucristo había renacido y se daba por terminada la abstinencia. Con el tiempo, la Iglesia Católica fue cambiando y sólo prohíben el consumo de carne los viernes de la Semana Santa.
A principio del siglo XIX, se dejó atrás la práctica de entregar huevos de gallina y se comenzó a obsequiar huevos de chocolate. A ello, se ha sumado un personaje llamado Conejo de Pascua, quien es el encargado de traer los huevos, los cuales a veces son escondidos por toda la casa para que los niños los encuentren y se diviertan en la búsqueda.
Receta Huevo de Pascua
Ingredientes
600 gramos de chocolate de leche especial para huevos.
Preparación
- Fundir el chocolate y colocarlo en el molde hasta cubrir toda la superficie. Luego de unos segundos retirar el excedente y dejar solidificar. Realizar lo mismo con la otra mitad.
- Llevar ambas mitades a la heladera durante 10 minutos. Retirar del frío y desmoldar ambas piezas.
- Colocarlas sobre un soporte plástico o aro de metal.
- Llenar una manga con chocolate fundido y aplicar en los bordes internos de una de las mitades.
- Finalmente unir y pegar ambas partes hasta formar el huevo.
- Decorar a gusto.
Opcional: Antes de cerrarlo se puede rellenar de chocolates, confites o caramelos.