Cada 3 de mayo se celebra el Día Nacional del plato que conquista a grandes y chicos.
Fritas o al horno. Con puré o ensalada. De carne o de pollo, la milanesa es la comida preferida de los argentinos. Para rendirle homenaje, la ciudad de Luján realizó un histórico espectáculo donde participaron Mariano Peluffo, el chef Luciano López Fuente y 20 cocineros más.
Las incógnita sobre su origen continúa hasta el día de hoy, pero de lo que no hay dudas es que fue inspirada en la cocina europea y desembarcada en nuestro país por los inmigrantes en el siglo XIX.
A pesar de ser tan popular en Argentina, los inicios de la carne empanada nos lleva a cruzar el Océano. El relato más antiguo cuenta que el cocinero Pietro Sorba -en uno de sus libros- enseña que un menú del 1134 ofrecía un plato llamado ‘lombolos cum panitio’, que en latín hace referencia al lomo con pan.
Por otro lado, algunos historiadores aseguran que durante la tercera guerra de la Independencia italiana en 1866, uno de los más famosos platos de la cocina austriaca: el wiener schnitzel o escalope vienés, llegó al norte del país durante la invasión, expandiéndose por toda Viena. Este preparado es muy similar a lo que actualmente conocemos como milanesa, se realiza con una rebanada fina de carne de ternera, la cual es sumergida en harina de trigo y luego se la pasa por huevo y pan rallado.
Pero los italianos contradicen estos dichos, afirmando que no es más que una reversión de la ‘cotoletta alla milanese’, la cual se prepara con una costilla de ternera con hueso, se pasa por huevos y luego por pan.
900 años después de la disputa -en 2008- la municipalidad de Milán utilizó los textos para darle el estatus de patrimonio oficial de la ciudad. Mientras que en Argentina, la fecha elegida surgió a través de las redes sociales, cuando un grupo de Facebook realizó una votación acerca de cuándo tenía que ser el día para homenajearla. Ante ello, miles de usuarios votaron por el 3 de mayo, dejando una nueva efeméride instalada para celebrar una parte de la gastronomía argentina.
Este año, la fiesta se llevó a cabo frente a la Basílica de Luján, donde cocinaron la milanesa napolitana más grande del mundo. Midió 3 metros de ancho por 4,02 de largo y pesó 926 kilos. 1.500 personas disfrutaron del espectáculo y degustaron la preparación del chef Luciano López Fuente y sus 20 cocineros.
