Gracias a una iniciativa del Área de Turismo municipal, es posible para las personas hipoacúsicas disfrutar de un recorrido por diferentes puntos turísticos de la ciudad, mediante visitas guiadas que cuentan con intérpretes en lengua de señas.
Bahía Blanca tiene propuestas y planes para todos los gustos: ya sea con amigos, en pareja o en familia. Y lo que hace tan especial a esta ciudad de la Provincia de Buenos Aires es que gracias a una iniciativa del Área de Turismo municipal, ofrece intérpretes en lenguaje de señas para que las personas hipoacúsicas también puedan disfrutar de los recorridos. El paseo portuario es el mejor ejemplo de ello.

Por un lado, se visita el Paseo del Puerto, que se compone de un espacio recreativo, que al estar junto al mar, permite apreciar las lanchas pesqueras artesanales y grandes embarcaciones que navegan por la costa. Así, el Puerto de la ciudad se transformó en un lugar ideal para el esparcimiento y el disfrute del aire libre, ya que además cuenta con equipamiento necesario para contemplar el mar y las actividades náuticas.
Otro punto de interés es el Museo del Puerto, el cual está especialmente dedicado a la historia y el presente de Ingeniero White, pueblo y puerto de Bahía Blanca. A través de la visita, se busca estimular el recuerdo a través de objetos de uso cotidiano de otras épocas, con salas especialmente adaptadas que permiten conocer el modo de vida de sus primeros pobladores.

Por último, el Museo y Taller Ferrowhite cumple una doble función: además de exhibir cosas, allí también se fabrican. Con más de 5000 piezas del ferrocarril y el puerto, es un punto de partida para meterse de lleno en este mundo y así comprender cómo se organizaban los talleres: cómo se utilizaban esas herramientas, cómo eran el orden y qué conflictos debía afrontar la sociedad a la que servían.
Para disfrutar de cualquiera de estos paseos y contar con intérprete para personas con hipoacusia, es necesario realizar la reserva previa y coordinar la visita guiada.

Por Christian Ali Bravo.